Diferencias entre neumonía bacteriana y viral

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¿Sabías que la neumonía es la quinta causa de muerte en México? De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.

¿Cómo se desarrolla la neumonía?

Al respirar, el cuerpo tiene la capacidad de filtrar los gérmenes del aire para proteger los pulmones. El toser es una herramienta para mantenerlos alejados. Si llegan a ingresar, el sistema inmunológico entrará en combate para tratar de impedir un problema de salud. Sin embargo, si el enemigo logra burlar las defensas, podría infectar los pulmones y desencadenar un cuadro de neumonía. Ocurre porque se genera una inflamación en los sacos aéreos, pudiendo ocurrir solo en uno o en ambos. Como resultado, se llenarán de líquido o pus, provocando tos con flemas, fiebre, escalofríos y dificultad para respirar, de acuerdo con Mayo Clinic (A).

 

Características y diferencias de los tipos de neumonía

Al tratarse de un proceso infeccioso, la American Lung Association reporta que existen tres tipos de microorganismos patógenos responsables de su aparición, lo que determina su nombre y sus peculiaridades (B):

Neumonía Bacteriana: Aparece después de un proceso de gripe, tras la recuperación de una cirugía, enfermedades respiratorias o un sistema inmune débil. Por lo regular, solo ataca a uno de los sacos aéreos y se le denomina neumonía lobar. Es fácil eliminarla con antibióticos. El tratamiento específico para la neumonía bacteriana implica el uso de antibióticos, que son eficaces para combatir la infección bacteriana. La administración oportuna de estos medicamentos es esencial para una recuperación exitosa.

Neumonía Atípica: Puede ser causada por tres diferentes tipos de bacterias. Mycoplasma pneumoniae, generalmente se presenta en personas mayores de 40 años que trabajan en hacinamiento; Chlamydophila pneumoniae, es responsable de infecciones en las vías respiratorias superiores y en ocasiones provoca una neumonía leve; Legionella pneumophila, no se transmite de persona a persona. Estas infecciones se conocen como atípicas debido a su baja frecuencia y responden a antibióticos diferentes que las bacterias típicas. El tratamiento específico para la neumonía atípica implica el uso de antibióticos que son efectivos contra estos patógenos particulares.

Neumonía Viral: Se desarrolla en las vías respiratorias superiores y suele ser detonada por diferentes tipos de virus, incluido el de la influenza o el CoV-2 responsable también del COVID-19. Este tipo de infección tiene una duración más corta que la neumonía bacteriana, pero lamentablemente no responde a los antibióticos. El tratamiento para la neumonía viral implica enfoques sintomáticos, como el uso de antivirales para aliviar los síntomas y reducir la duración de la enfermedad. Además, se pueden utilizar medicamentos para la fiebre, la tos y el dolor para mejorar el bienestar del paciente.646761_b387f75f210548ea810380c71ae693d3~mv2

Impacto a largo plazo de la neumonía:

La neumonía, ya sea de origen viral o bacteriano, puede dejar secuelas a largo plazo en la salud pulmonar y general del individuo. Después de superar la fase aguda de la enfermedad, algunos pacientes pueden experimentar una capacidad pulmonar reducida, fatiga persistente o incluso problemas respiratorios crónicos. Este impacto a largo plazo subraya la importancia de un seguimiento médico continuo y personalizado. Los profesionales de la salud pueden realizar evaluaciones pulmonares regulares, recomendar ejercicios respiratorios y ofrecer asesoramiento sobre el manejo de posibles complicaciones. Un enfoque integral en la recuperación a largo plazo puede mejorar significativamente la calidad de vida después de un episodio de neumonía.

 

Comparación de radiografías o pruebas diagnósticas:

El diagnóstico preciso de la neumonía, ya sea viral o bacteriana, implica el uso de varias pruebas, siendo las radiografías pulmonares una herramienta fundamental. Las imágenes radiológicas pueden revelar patrones característicos en los pulmones, ayudando a diferenciar entre los dos tipos de neumonía. Además, otras pruebas diagnósticas, como análisis de sangre para evaluar los marcadores de inflamación y cultivos respiratorios para identificar el agente infeccioso, contribuyen a una evaluación integral. La combinación de estas pruebas permite a los profesionales de la salud tomar decisiones informadas sobre el tratamiento y garantizar una atención personalizada según el tipo de neumonía.

Consecuencias fatales de la Neumonía Viral:

Si no se trata adecuadamente, la neumonía viral puede tener consecuencias fatales. Las complicaciones graves pueden incluir insuficiencia respiratoria, daño pulmonar permanente y, en casos extremos, pueden poner en peligro la vida del paciente. Es crucial destacar la importancia de la atención médica temprana y el manejo adecuado de la neumonía viral. La identificación rápida de los síntomas, la búsqueda de atención médica inmediata y el seguimiento continuo son esenciales para prevenir complicaciones graves y garantizar un pronóstico favorable.

Si experimentas síntomas como tos persistente, fiebre, dificultad para respirar o cualquier malestar en el pecho, te invitamos a buscar atención médica de inmediato. Solo un profesional de la salud puede proporcionar un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado. La detección temprana y el tratamiento oportuno son fundamentales para una recuperación completa.
 

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